Quebraron los lamentos tiñendo de sangre
las miradas humedecidas
de los mudos suspiros...
¿Cómo pudieron?
¿Cómo permitimos mutilar la esperanza?
Mil veces muerto en la sinuosa conciencia
del que no quiere o puede creer...
Hoy,siglos mas tarde
Nos duele en el alma
el silencio
sintiendo latir sus agónicos ojos
clavando el perdón en el frío madero.
Y hoy puedo vivir respirando los vientos azules
Imperturbable....
Inmesurable de pájaros vivos que vuelan errantes
en vuelos pintados de inercias
que duelen y rompe
no deja de sangrar la grieta estacionada
en un espacio sin tiempo.
Hoy susurro su nombre por las bocas selladas
que duermen sin vueltas en las pálidas
tumbas que ahogaron su credo en su propio epitafio....
¿Y que hemos aprendido?
¿Que hemos recogido de la dulce cosecha?
Talvés un día el hombre comprenda
que vivir por amor
se lega el amor
que aunando semillas en el jardín de las venas
se llueve goteado el beso del sol...
Y camina libando por su verbo infinito
el cálido abrazo de la luz encendida....
Entonces.
Cae en mi voz...La música de mil voces.
Margarita Parada Palma.
(D/R)
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